La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) celebró el pasado 9 de mayo el IV Encuentro Nacional de Archivos Eclesiásticos. El tema de este año, Panorama y Expectativas, versó sobre el patrimonio documental de la iglesia católica mexicana. Las palabras inaugurales estuvieron a cargo del obispo de Cuernavaca y secretario general de la CEM, Ramón Castro, quien hizo un llamado a los presentes para trabajar de forma disciplinada por la conservación de los archivos, ya que tienen en sus manos la preservación de la historia de la salvación. Acto seguido el moderador, padre Juan Carlos Casas García, hizo una breve presentación de los ponentes para, posteriormente, dar inicio con su participación en este encuentro la doctora Stella María González Cicero con la ponencia “Un largo andar en los archivos eclesiásticos”. La directora de Adabi hizo memoria de 44 años en el rescate del patrimonio documental civil y eclesiástico de México, en donde abarcó las distintas instituciones en las que realizó dicha labor, así como las diferentes metodologías de aproximación para iniciar y consolidar el apoyo a los archivos eclesiásticos de muy diversos niveles. Las variadas experiencias de la Dra. González en diferentes instituciones hicieron síntesis en el proyecto de Adabi, lo que permitió iniciar con el rescate y organización de los archivos eclesiásticos sin atravesar el periodo de novatez de otros tiempos. De igual manera, la ponente enumeró los proyectos más destacados con los que Adabi ha trabajado en 19 años, e hizo unas reflexiones finales sobre la disciplina y el compromiso que se deben tener a largo plazo para conseguir la preservación de los archivos y generar un interés en las comunidades de todo el país.
Como segunda ponente se presentó la directora del archivo de la Conferencia Episcopal Española, María del Carmen Valle Sánchez. En su intervención hizo una revisión de las decisiones y políticas que se han llevado a cabo en dicho archivo durante los ya 51 años de su existencia. Este acervo —creado a raíz del Concilio Vaticano II en 1966— reúne la documentación de los 50 órganos que componen a la Conferencia Episcopal, que con el tiempo han aumentado las necesidades y con ello las actualizaciones, no solo de tecnología, también del cuadro de clasificación de este acervo que es, al momento, meramente administrativo, pues la legislación española eclesiástica por reglamento todavía impide la consulta abierta de casi la totalidad de sus fondos. Problemas como la actualización de programas, migración de archivos, desbordamiento de bodegas e incluso financiamiento de ciertos proyectos son los tópicos que se han tenido que resolver en los últimos años, hasta lograr en su totalidad una política de cero papel a largo plazo.
La Coordinación de Archivos Civiles y Eclesiásticos, a cargo de Areli González Flores y Candy Ornelas Méndez, así como el Centro de Conservación, Restauración y Encuadernación de Adabi coordinado por Roxanna Govea Martínez, presentaron la ponencia “Diagnóstico nacional de archivos eclesiásticos de México”, instrumento de recuperación de datos que pretende hacer patente la realidad archivística del patrimonio documental eclesiástico, en particular de los obispados, para con ello proponer acciones pertinentes para la conservación de los mismos. Se presentaron las preguntas agrupadas dentro de diferentes temáticas que van desde los datos generales hasta los espacios de resguardo de los acervos y el instructivo que acompaña al instrumento; sobre este último, el padre Casas García comentó que la logística con la que se llevará a cabo este diagnóstico buscará incidir de manera directa en los obispados.
Para finalizar el encuentro se presentó el canónigo archivero Francisco Juan Martínez, presidente de la Asociación de Archivos de la Iglesia Española que, al igual que su compatriota, mencionó que esta asociación cuenta ya con más de medio siglo de experiencia, y se refirió a los archivos históricos como la “cenicienta del patrimonio cultural”. En este espacio presentó los avatares que ha sufrido la asociación y también los logros alcanzados, como la publicación de una guía de archivos y bibliotecas eclesiásticas en España y la organización de 32 congresos a lo largo de su trayectoria.